Noche de ansiedad y polvo.


Somos simples microbios en una mota de polvo vagando por el mundo cuántico de otro mundo macroscópico...
No tenemos un porqué, no tiene sentido tanto esfuerzo si al final no somos nada. Temo por la cantidad de sueños que voy creando en mi camino y por su posible derrumbe si hay un simple cambio en nuestro multiverso y mi foco se apaga... muchas veces me pregunto si realmente importa estudiar, aprender, amar y crear; si al final sólo seremos minerales donde alguna vez hubieron recuerdos y planes sin concluir. Tal vez no importa qué hagamos, ya que al final seremos simples cráneos donde alguna vez habitó un órgano tan hermoso y repleto de neuro-receptores, que le hacían pensarse “enamorado” o “Con el corazón roto”... simples complejos proteicos creando un espectro de lo que llamamos “sentimiento”.
Al final todos conectamos... todos vamos al mismo desenlace: muerte. Todos terminamos por ser materia viva en descomposición, inútil y acabada por los años ¿Realmente importa lo que hagamos aquí? ¿Para qué esforzarnos por conseguir lo que nuestra sociedad ha impuesto como “Vida Ideal”?
Estudiar carrera, posiblemente especialidad, trabajar, comprarse un carro y una casa, enamorarse, casarse, tener hijos, llevarlos a la escuela, festejar los días festivos... ¿es realmente de lo que trata vivir?
Es terrorífico pensar que existe un mundo cuántico en el que hay seres con vida, tan diminutos y tan inconscientes de lo que sucede más allá de ellos, para lo que son, lo que hacen en este multiverso. ¿Seremos nosotros un microbio en una simple mota de polvo para algún ser más grande? ¿A caso seremos el mundo cuántico de otro mundo macroscópico?
Infinidad de tamaños, de los cuales somos seres microscópicos ocupando una flor en un inmenso jardín, jardín que se encuentra en un bosque, bosque que se encuentra en una ciudad, ciudad que es parte de un estado, estado que está en un país, país de un continente, continente de un mundo, mundo de un sistema solar, sistema solar de millones de sistemas planetarios... ¿Qué somos realmente? Somos simple polvo en el viento; un ser tan banal y efímero.
No somos nada, no importamos.
¿Por qué debería de molestarme en escribir poesía, crear sinfonías, estudiar, o incluso amar a otro; cuando no soy más que un  efímero microbio en una mota de polvo tan microscópica?

Comentarios

➥POPULAR